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El nuevo edificio de la Escuela Nº 289 de Tiempo Completo en el barrio Colón (Montevideo) requirió una inversión de US$ 1.584.994. El centro educativo, que funciona desde hace 37 años, estrena nuevo local y modalidad de trabajo con jornadas de aprendizaje que se extienden desde las 8:00 a las 16:00 horas.

La nueva Escuela, que alberga a 165 alumnos, cuenta con seis aulas, dirección, sala docente, cocina, comedor y servicios higiénicos. Además, posee tanques de abastecimiento, bombas de impulsión, panel solar y garrafas de gas. Asimismo, tiene espacios enjardinados y pavimento de caucho con juegos. El predio se extiende a lo largo de 3.127 m2. El local educativo fue construido a través de la modalidad de participación público privada.

Durante la inauguración, la presidenta de la Administración Nacional de Educación Pública, Virginia Cáceres, expresó: “Si uno hace el ejercicio de soñar o de pensar cuál sería el rol que uno querría que la escuela pública ocupara en un barrio, al escuchar las distintas historias que se fueron narrando aquí, esta escuela se asemeja bastante al papel que uno desearía que los centros educativos tuvieran en el territorio”.

“La escuela pública debe ser mucho más que el lugar donde los niños y niñas vienen a estudiar. La escuela pública debe ser el lugar de referencia de las comunidades, de los barrios, en donde las familias, docentes y alumnos puedan construir entre todos no solamente la educación que quieren para sus hijos, sino también el barrio y la sociedad en la que quieren vivir”, valoró.

La directora general de Educación Inicial y Primaria, Olga de las Heras, transmitió su agradecimiento y afirmó: “Hoy vemos el resultado de un gran esfuerzo, el resultado de un trayecto que se realizó entre varios protagonistas, las familias, el barrio, el Complejo Artigas, todos vieron la necesidad de tener un propio centro educativo y así fue que surgió esta escuela”.

“En este año, nueve centros educativos pasan a la modalidad de Tiempo Completo. Un gran esfuerzo: cinco jardines de infantes y cuatro escuelas que van a ser de esta modalidad. Esto lleva a que los niños tendrán más tiempo en la escuela, con lo que ello implica: más tiempo de calidad pedagógica para estar con sus compañeros, interactuar y relacionarse, más tiempo para compartir esas ricas comidas, los desayunos, almuerzos y meriendas, todas vivencias que no olvidarán”, reflexionó.

La directora de la Escuela, Daniela Da Cunha, destacó el apoyo y compromiso de las familias para pasar a la modalidad de Tiempo Completo. “Sabemos que es una escuela chiquita, pero tenemos grandes expectativas, nos gusta soñar en grande. Ese es el objetivo nuestro de cada día, que nuestros niños puedan ser felices, que estén en un lugar donde se sientan motivados y desarrollen todo su potencial”.

La ex directora, Edel Sedes, expresó: “Los maestros solemos decir 'estoy acá en mi escuela' y ¿con qué derecho? Creo que esto que todos decimos tiene que ver con el sentido de pertenencia. Si logramos decir ‘mi escuela’ es porque estamos convirtiendo cada acto educativo en un acto de amor verdadero y así es como podemos enseñar y aprender”.

Por su parte, Nelly Olivera, integrante de la primera Comisión de Fomento de la Escuela y actual colaboradora, destacó: “Estamos pensando todo el tiempo en hacer algo por la escuela”.